La Raíz de Málaga

Manuel Ortega, de 32 años, oriundo de Málaga y descendiente de gitanos se internó en la música flamenca desde muy pequeño cuando sus abuelos escuchaban y cantaban Copla Española. Sus raíces e influencias lo llevan a querer dedicarse a la música desde los ocho años cuando empieza a estudiar piano, y posteriormente guitarra y canto.

Más adelante en su vida, Manuel vive en Madrid y en Barcelona, donde se involucra en varios proyectos musicales, y aprende más del flamenco al rodearse de músicos y representantes del género. En el 2001, Manuel conoce a Javier Navarro, también malagueño, y comienzan a hacer música juntos en diversos géneros, entre ellos un proyecto de Metal Industrial llamado “Bloody Addiction” que tuvo gran aceptación entre la juventud española.

Javier, también se adentra en la música flamenca desde niño por la influencia de su familia y se interesa en tocar la guitarra siendo muy joven. Su preparación como músico lo lleva por el camino flamenco, mismo que retoma siendo ya mayor y queriendo volver a sus raíces. Para él, el flamenco siempre fue una fusión de culturas al igual que su ciudad, es por ello que se identifica con el género y decide dedicarse a él para poder transmitir el sentimiento que llevan los andaluces en la sangre y el amor por el folclore de su país.

La Raíz de Málaga comienza como un “regreso a los orígenes” (premisa de la cual toma su nombre posteriormente) y en sus inicios Javier y Manuel tocaban en bodas gitanas, experiencia que enriqueció su conocimiento del género, dándoles más herramientas para que el proyecto tomara forma.

Roger Jaffet, fundador de la banda de rock progresivo “Jeltro” y productor musical de High Hopes Recording House, conoce a Javier en el año 2005, mientras realizaba una producción en Barcelona. En ese momento comienzan a tocar flamenco de manera informal y como mero divertimento, al integrar a Manuel y hacer algunas presentaciones de “barrio” deciden formalizar el proyecto y darle por nombre “La Raíz”; tiempo después complementan el nombre como “La Raíz de Málaga”, pensando en hacer de éste un proyecto de talla internacional y que el nombre siempre identificara el origen del mismo.

Omar Albino, bajista de 23 años, tiene una inducción a la música un tanto extraña, pues por un accidente en la mano le recomiendan tocar guitarra o algún instrumento similar para acelerar su rehabilitación; él comienza tocando guitarra pero seis meses después se decide por el bajo. Al poco tiempo se da cuenta de que para él la música es ya un medio de comunicación y un lenguaje universal, por lo que la hace su profesión y se integra a La Raíz de Málaga con el afán de conocer más sobre este género y adentrarse en la cultura española tanto como sea posible.

Alex Tapia se integra al proyecto con el cajón flamenco al llevar 6 años como percusionista. Le llama la atención el flamenco al tener contacto con grupos de baile tradicional y notar la fusión rítmica y cultural; por lo que busca penetrar en esta combinación de sonidos, uniéndose a La Raíz de Málaga para poder seguir comunicándose en el idioma de la música.

En una unión de jóvenes artistas, La Raíz de Málaga retoma el acento del castellano antiguo o andaluz, la copla española e influencias como Triana, Paco de Lucía y Camarón de la Isla, entre otros; para crear una fusión de sonidos y poder seguir llevando la tradición y la mezcla de estilos del flamenco a todo el mundo.